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Carro fúnebre transportando el cuerpo de Salvador Chimento.
Carro fúnebre transportando el cuerpo de Salvador Chimento.
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Cristian Mercado

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Con calle de honor fue despedido el cuerpo del anestesiólogo Salvador Chimento

Colegas y demás profesionales de la salud le dieron emotiva despedida a su salida de la Clínica del Caribe.

Una emotiva despedida le dieron sus familiares, colegas y demás profesionales de la salud al anestesiólogo Salvador Chimento Güete, fallecido en Barranquilla víctima del Covid-19.

Chimento Güete, quien también se desempeñaba como docente en la Universidad Metropolitana, se encontraba internado en la Clínica del Caribe, pero no logró ganar su lucha contra el virus.

En la tarde de este domingo, los  afiliados a la Asociación de Profesionales Anestesiólogos Permanentes y demás personal médico le hicieron calle de honor a la salida de su cuerpo en la Clínica del Caribe.

Teniendo en cuenta que debido a la pandemia del Covid-19 los funerales están restringidos, una caravana acompañó el cuerpo hasta el Parque Cementerio de La Eternidad, en la vía a Puerto Colombia.

Durante la ceremonia su hijo Filippo Chimento, también anestesiólogo, dijo que su padre “fue una persona bastante querida que se desempeñó como Médico Anestesiólogo hasta el último momento. En algún momento le dije que se retirara de la sala y dijo que no lo iba a hacer porque él tenía que seguir luchando por sus pacientes. Ahora me queda un sinsabor, miedo, temor de seguir trabajando en esta pandemia, pero hay que seguir luchando por los pacientes”.

 

 

“Yo seguiré en el quirófano recordando a mi papá como ese ser humano noble, buena gente y lo recordaré siempre”, agregó su hijo quien también se desempeña como Médico Anestesiólogo.

Indicó que el virus lo cogió de repente, indicando que tuvo una sintomatología atípica que finalmente lo llevó a la Unidad de Cuidados Intensivos.

 

 

Por su parte, Patricia Vélez, de la Asociación de Anestesiólogos del Atlántico, lo recordó como “una persona formidable, un ser humano bondadoso, buen amigo y buen compañero”.

Dijo que Salvador Chimento fue un profesional “entregadísimo a su profesión, a su especialidad, con mucho amor”.

Tanto la salida como el transporte de los restos mortales, se cumplieron bajo las estrictas medidas sanitarias.

 

 

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