En medio de parranda Carlos Vives se tomó el Parque Cultural del Caribe

Como todo un redescubrimiento de lo que significa la esencia Caribe, describió el artista Carlos Vives su visita al Museo, recorrido que quiso hacer de manera incógnita y que disfrutó con toda la intensidad de sus sentimientos, ya que en las salas jugó, bailó, cantó y hasta lágrimas asomaron a sus ojos, al descubrir allí los referentes de su esencia caribeña.

El Museo está muy bien concebido, pues está pensado para la gente, está pensado para los jóvenes, está pensado para los niños. Es una manera muy moderna de aprender de lo nuestro pero conservando al mismo tiempo ese espíritu de lo tradicional, esos espíritus que conformaron nuestro Caribe. Considero que es un gran cabezazo, una gran idea y creo que necesitamos más museos como este”, señaló el artista samario. 

Vives fue recibido por la directora del Parque Cultural del Caribe, María Eulalia Arteta, el investigador Alberto Abello y funcionarios de la entidad, quienes lo acompañaron en un recorrido que inició por la Sala Gabriel García Márquez, que le dio la bienvenida con proyecciones del ‘Realismo Mágico’, cautivando todos sus sentidos. 

“Para mí como ciudadano Caribe haber hecho el recorrido y vivir, piso a piso, el viaje que es haber venido al museo, ha significado un viaje a mi interior, a entender qué somos y qué papel jugamos en nuestra región Caribe colombiana… venir al Museo es como corroborar tantas cosas. Me siento artista, me siento ciudadano del común, me da orgullo ver la esencia con la que está hecho nuestro Caribe: la esencia humana, la esencia geográfica, de lo que estamos hechos, salgo más convencido del camino que tomamos hace 25 años en la música. Venir al Museo me hace pensar que escogimos el camino correcto”, afirmó Carlos Vives. 

“No me dejo de sorprender del potencial de nuestra diversidad, y el Museo (del Caribe) como museo es un juguete, por eso yo los invito a los adultos que traigan a sus hijos, que traigan a su familia y disfruten. Que hagan este viaje. Van a sentir muchas cosas, a mí me ha hecho llorar (se quiebra su voz) me ha hecho reír, me ha hecho sentir muy emocionado de ser Caribe, de ser colombiano, así que yo lo recomiendo”, expresó Carlos Vives.

Durante toda la visita Vives mostró su gran sensibilidad y calidad humana, fue un hombre amable y cercano que cantó décimas, que se divirtió bailando, que jugó a las palabras en la pared del ‘Caribeñol’, que se sintió pequeño al plasmar su firma en el mural de la Sala de la Expresión, donde aparecen grandes exponentes como Petrona Martínez, Los Gaiteros de San Jacinto, Joe Arroyo y la Niña Emilia.

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