Jefferson Gómez y David Murillo disputando el balón con Andrés Cadavid.
Jefferson Gómez y David Murillo disputando el balón con Andrés Cadavid.
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Cortesía Luis Álvarez

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Luis Sánchez le robó un triunfo a Junior, que aun así sacó un punto en Bogotá

El equipo barranquillero terminó 1-1 con Millonarios, a pesar del penal inventado por el árbitro valluno.

Junior se trajo un punto de Bogotá, al empatar 1-1 ante Millonarios en un error grosero y descarado de Luis Sánchez, quien regaló un penal inexistente a Millonarios y además expulsó a Sebastián Viera, quien en su justa reclamación perdió los estribos ante la desacertada situación.

El partido mayormente fue un cambio de pies constante de la pelota, que se movió de un lado del terreno a terreno sin que se pudieran generar mayores acciones de riesgo para el conjunto rojiblanco y menos para los de casa que por momento hasta prefirieron optar por el contragolpe como herramienta principal.

Por el lado de la conducción, Jarlan Barrera intentó hilvanar siempre los mejores pases para sus compañeros. De otro lado, Cristian Marrugo condujo a Millonarios, en un partido donde los delanteros estuvieron carentes de efectividad.

Las mayores emociones llegaron sobre el final del compromiso, cuando el cuadro de los Millonarios logró un tiro de esquina, previa estirada de Sebastián Viera en un disparo de media distancia, a los 39 minutos.

Tras la ejecución de dicha pelota, en el segundo palo Ayron Del Valle se las arregló para desmarcarse y conectar un cabezazo a la raíz del poste, por suerte, un Viera que ya estaba desacomodado, logró reaccionar con su pierna para evacuar la acción.

La respuesta de Junior llegó a los 44 de acciones, cuando por la banda izquierda Gabriel Fuentes se robó el costado y buscó en un pase a la media luna a un creativo Jarlan, que puso una asistencia en gotera a James Sánchez quien intentó una chilena que se quedó en las manos del arquero Ramiro Sánchez.

Así, con el marcador en tablas, los de Julio Comesaña se fueron al descanso. Un 0-0 que era negocio para los barranquilleros y que tenían todas las opciones para sostenerlo en el segundo tiempo, si no cometían ningún error grave en defensa o en el mediocampo.

Sin embargo, la segunda mitad venía cargada de emociones y un momento completamente polémico, por culpa del fatal y vulgar arbitraje del vallecaucano Luis Sánchez.

Junior se fue en ventaja en el marcador a los 52 minutos, cuando apenas estaba iniciando la segunda mitad, los barranquilleros hilvanaron desde el fondo un contragolpe conducido por James Sánchez que la abrió a la derecha para Teófilo Gutiérrez, quien con mucha visión asistió a Jarlan Barrera para que impactara un zurdazo que se anidó en el fondo de la red.

Los minutos fueron pasando, y todo parecía indicar que con lo poco que hacía Millonarios en la cancha no iba alcanzar para sacar el empate ante un elenco barranquillero que hacía mejor las cosas por obtener el triunfo.

Sin embargo, un evento pusilánime del juez Luis Sánchez cambió drásticamente la historia del partido y le robó descaradamente dos puntos del bolsillo del conjunto de Julio Comesaña.

A los 80 minutos, en una pelota disputada en el salto por el defensa Gabriel Fuentes, que aunque saltó con el brazo en alto nunca tocó la pelota, fue señalada descaradamente por Sánchez como un penal. Una pena máxima inexistente, un robo claro a todo el trabajo del equipo durante la semana.

Durante la sanción del penal, Sebastián Viera reclamó airadamente el invento casi criminal de Sánchez, además provocado en un claro gesto antideportivo por parte de Juan Guillermo Domínguez.

Sánchez se hizo el ciego ante un empellón a Viera, pero expulsó al capitán juniorista cuando respondió. Algo parecido con lo ocurrido en el partido Junior vs Deportivo Cali en el duelo Luis Díaz vs Juan Camilo Angulo. El juniorista recibió doble falta y cuando respondió el único expulsado fue él. ¿Premeditación arbitral contra Junior en esta fase?

Frente a la pelota se colocó Andrés Cadavid, quien sin remordimiento, sacó un potente balazo en el que nada pudo hacer José Luis Chunga para contener. Un 1-1 que fue un robo escandaloso en El Campín.

Sobre el final, entre insultos propinados por Juan Guillermo Domínguez a Julio Comesaña y mucha tensión en el terreno de juego, Millonarios celebró su empate inventado y regalado gracias al acto profundamente equivocado de Sánchez, quien faltó a su compromiso de justicia con el juez.

Aun así, pese a la metida de mano por parte de Sánchez, Junior consiguió un resultado bueno teniendo en cuenta que se jugó de visitante y ahora se concentrará en el próximo duelo de Liga ante Once Caldas y a mitad de semana ante Atlético Nacional, por Copa Colombia.

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