El Junior de Barranquilla empató la noche de este domingo 0-0 de visita ante el Atlético Bucaramanga, en un partido donde se quedó con uno menos, los locales desperdiciaron un tiro penal y sobre todo, los actuales bicampeones de Colombia no encuentran un buen fútbol. 

Junior juega cada vez, un poco peor. La verdad es que el contenido de esta crónica podría llenarse más con críticas al ausente juego del equipo que sobre sus jugadas, pues tan solo generó apenas para escribir dos párrafos en esta nota. El accionar de los barranquilleros fue realmente pobre. 

Más allá de ponerse a debatir en la actuación del central Leonard Mosquera, que pitó un penal inexistente a favor de Bucaramanga, en el cual le sacó amarilla a Germán Mera para luego botarlo en la siguiente acción por algún comentario del defensor, la verdad es que Junior estuvo durante buena parte del partido más cerca de perder que otra cosa.

La actitud ofensiva de los barranquilleros se reduce a dos remates, aislados, de Teófilo Gutiérrez al inicio de cada tiempo. A los 9 minutos mandó una pelota por fuera tras un rebote en el palo cuando tenía el arco servido a su entera disposición, y en la segunda mitad apareció por detrás de los centrales para cabecear un centro de Marlon Piedrahíta. 

El repertorio de llegadas lo completó el extremo Edwuin Cetré, a los 27 minutos del complemento, en una jugada individual en la cual gambeteó y sacó un zapatazo que reventó en el segundo palo tras un disparo con mucho efecto y esquinado. Luego de eso, pare de contar. 

Capítulo a parte - y vergonzoso- fue el episodio entre Sebastián Viera y el venezolano Yohandry Orozco en un cobro de tiro libre a los 18 minutos del segundo tiempo. El portero quedó de patear un tiro libre y mientras discutía la distancia de la barrera, Orozco se adelantó y pateó estrellando el balón en el muro humano. 

El rebote fue rechazado por un sorprendido Viera, que molestó le reclamó con un grito por atreverse a robar sin ninguna pena un tiro libre que se había determinado que el capitán iba a disparar. En su camino de vuelta a la portería, Viera le dejó el reclamo a Comesaña que minutos más adelante ajustó cuentas. 

Y es que el segundo tiempo fue un sufrimiento para Junior, y nuevamente sobre los minutos finales conoció la adversidad, como se le volvió costumbre en este torneo. Más puntualmente, esta vez tuvo que sufrir 15 minutos con un hombre menos y contener el aliento en un tiro penal.

El central Leonard Mosquera consideró penal una jugada de Mera sobre Sergio Romero, cuando en realidad no pasó nada más de una disputa de la pelota en el área, y encima puso amarilla al defensor. Sin embargo, el tiro de Jhon Pérez pegó en el palo derecho de Viera para mantener el 0-0 en el marcador. 

Al reiniciar el partido, Mera le dijo algo al juez que le mostró una segunda amarilla y lo expulsó del partido. Comesaña, sabiendo que tenía que arreglar a su defensa, se cobró la deuda con Yohandry Orozco y lo sacó del partido para ingresar a Rafael Pérez. 

Junior aguantó como pudo el embate de un limitado rival, para al final rescatar un punto. Un resultado que no tranquiliza para nada a los aficionados y que ahora deja muchas dudas en cuanto al funcionamiento del equipo en los minutos finales y la estabilidad del camerino tras la disputa de Viera y Orozco.

Son 11 puntos logrados hasta ahora y las siguen fechas pasando, lo peor es que Junior no está ganando. El bicampeón juega de una manera indigna para sus charreteras y los puntos para disputar se están acabando. ¿Será que ya es hora de patear el tablero? Quién sabe qué pasará en el remate del campeonato.